Reseña "Amargo como el amor", de Marcia Cotlan

"Amargo como el amor" es una novela de Marcia Cotlan que participa en en uno de los book tour organizado por "Books around the magic world".

Sinopsis (de la autora):

Catalina siempre ha amado a Mateo Aspériz, pero está obligada a casarse con Tobías Ordaz. Para ello deja su Vizcaya natal y parte rumbo a Maracaibo, donde el que será su esposo tiene una hacienda productora de cacao. Unos meses después, Mateo emprende el mismo viaje para ir en su búsqueda.

El tiempo, la distancia y que Tobías no resulta ser el hombre despreciable que ella creía, harán que la joven se plantee si el amor que siente por Mateo es verdadero y si realmente odia a su futuro marido.

En medio de esta encrucijada, se descubre un terrible secreto de su pasado que ensombrece aún más su difícil y complicada situación. Ahora que está sola y despojada de todo cuanto creía suyo, ¿será capaz de escuchar los dictados de su corazón?

Comentarios:

El eje central de “Amargo como el amor” es el tira y afloja entre la pareja protagonista. Todo lo demás es el decorado en que se mueven junto al resto de personajes en una época y lugar con algún conflicto más bien económico que político, aunque como siempre estos aspectos se mezclan.

Incluso hay secundarios que podrían haber tenido más importancia en el desarrollo de los acontecimientos y cuyo papel se limita a unas mínimas intervenciones para justificar ciertas acciones de los protagonistas.

Aquí no aparece, mientras que sí lo hace en otro formato, una nota de la autora acerca de las circunstancias de la mano de obra en la hacienda de Tobías Ordaz. Comprendo sus reservas sobre la esclavitud y también me parece una lacra social. No obstante, es un detalle accesorio y considero más importante el ambiente general de la hacienda y el trato que haya entre sus habitantes, que básicamente coincide con las de la autora sobre ese tema.

La intensidad de la trama amorosa apenas deja espacio para disfrutar de lo que podría haber servido como estancia turística en Venezuela, ya que se mueve en un casi continuo primer plano, con mínimas vistas panorámicas.

Aun siguiendo en la letra la máxima que refleja el título, “Amargo como el amor”, la sensación que me dado es que se ha añadido mucho azúcar a ese cacao sentimental entre Catalina y Tobías.

Si acaso es demasiado o está en su punto, es algo que deberán degustar las personas aficionadas al género romántico y que quieran disfrutar de una trifulca amorosa, digo, lectura muy entretenida y que satisfará sus expectativas.

Selin